La pena fijada fue de tres años de prisión, pero, al considerar ciertos régimen procesales, dictaminó que cumpla la condena de manera condicional.
Para cumplir con la pena en libertad, el joven deberá fijar residencia, someterse al control del Patronato de Liberados, no cometer nuevos delitos, no contactarse con las víctimas, abstenerse del consumo de alcohol o estupefacientes y adoptar un arte u oficio.