A su turno, Morales reconoció su culpabilidad por haber instigado a efectivos policiales, a principios del año pasado, a llevar a cabo sedición policial en un intento de protesta. La fiscalía le atribuyó que entre fechas 29 de enero y 25 de febrero de 2024, con el fin de instigar a un número indeterminado de efectivos policiales a levantarse contra la superioridad policial, grabó videos que publicó en redes sociales.
Asimismo, el letrado asumió haber presentado a un hombre como testigo falso en diversas causas. Morales determinó a este para que preste declaración ante la autoridad competente, faltando a la verdad en calidad de testigo en diferentes procesos penales en los cuales el letrado ejercía la representación legal de alguna de las partes intervinientes, y en las cuales ofreció a dicho testigo para realizar afirmaciones falsas, perjudicando a la administración de justicia y la fe pública judicial.