En Argentina, el 15,5% de los menores de 18 años sufrieron inseguridad alimentaria severa en 2021 mientras que 2 millones de chicos pasaron hambre por falta de recursos, según datos de la ONG Banco de Alimentos. Según los últimos datos del Indec, el 50,9% de los chicos de menos de 14 años es pobre.
El daño ambiental
El desperdicio de alimentos representa el 10% de todas las emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI), según figura en el documento elaborado por WWF. Esta cifra equivale al doble de las emisiones producidas por todos los automóviles conducidos en los EEUU y Europa en un año.
Entre los resultados del informe se destaca también la utilización en vano de 4,4 millones de kilómetros de tierras agrícolas y 760 kilómetros cúbicos de agua para producir el alimento que luego se desperdician.
Aunque varios países empezaron a desarrollar planes de acción para gestionar y evitar la pérdida de alimentos, el foco suele concentrarse en la última etapa de la cadena de suministro, omitiendo las instancias previas de producción.
Hasta la fecha, solo 11 de los 192 planes climáticos presentados como parte del Acuerdo Climático de París mencionan la pérdida y el desperdicio de alimentos.